martes, 30 de agosto de 2011

Los familiares lejanos

Pues resulta que no, que no me he muerto, tranquilidad (o no). Simplemente me fui al pueblo y allí no tengo interné.
El año pasado por esas fechas tuve una boda. Era de familia política lejana y fuimos porque nos apetecía pasar calor con el pelo recién alisado en la peluquería. Bueno, no, en realidad porque nos dejaron entre la espada y la pared y como tenemos un ligero retraso mental nos acuchillamos contra la espada. Total, que como no conocíamos a nadie, estuvimos bastante bien.
Lo malo fue en la otra boda. Fue unos meses antes, creo. Se casaba una prima lejana mía (que encima me cae muy mal, es una snob estirada) pero con la que tenemos bastante relación, así que nada, a la pelu a alisarse el pelo, al Corte Inglés a gastarte el dinero en un traje con el que podrías ir al palacio de la Zarzuela y que para colmo solo utilizarás un día, aguantar a mi hermano quejándose de la ropa y a mi madre desesperada porque no encuentra un bolso a juego con los zapatos, el vestido, la sombra del ojo derecho y el tono del pintalabios. Al menos esta vez calor no pasamos, pero el pelo se me fue a la mierda igualemente. Sí, señoras y señores, LLOVIÓ. Y la novia llegó tarde, y no nos dejaban entrar en la iglesia... Vamos, que en ese tiempo, además de adquirir poco a poco la apariencia del tío del 11811, tuve la oportunidad de conocer a mis encantadores parientes lejanos recién llegados de un remoto pueblo perdido en la Sierra de Cazorla, Jaén.
Lamentablemente, no recuerdo sus nombre, pues tiendo a bloquear en mi mente los malos recuerdos. Pero sí tengo en la cabeza, vívido como si fuese ayer (lo cual tampoco es para tanto, porque no recuerdo lo que comí ayer así que...).
Bueno, que me pierdo. Conocí a multitud de gente, ninguno menos de los 70, así que me vi inmersa en el frente juventud de mi familia.
Entonces fue cuando comenzaron los típicos comentarios que hacen las personas mayores: "¡Qué gupapa!" "¡Cuánto te pareces a (.. pon aquí un nombre al azar ..)!" y mi favorita: "¡Cuánto has crecido-barra-cambiado desde que te vi la última vez!" "¿Te acuerdas? Tenías (.. número al alzar, nunca supera los 2 años ..) y yo te hacía tal y cual y te decía que (bla bla bla)". Es en ese momento cuando piensas "pies para qué os quiero", pero como estás muy bien educada, sonríes y dices: sí, que viniste a casa porque mi madre acababa de llegar del hospital y yo tenía una semana, cierto.
Y te vas alejando poco a poco intentando no reírte o poner los ojos en blanco.



Por cierto, entrada dedicada a Silvia, que aparte de no enterarse de que tenía blog me dio la idea con la conversación del otro día. ¡Gracias! :D

FletchProductions ;)

martes, 2 de agosto de 2011

A mi blog se le pinza.

Como bien dice el título, mi blog pierde más la cabeza que yo, y como todo el mundo sabe eso no está bien.
Pues que os preguntéis, ¿por qué dirá esto ahora? Bueno, la explicación es sencilla, me da por afiliar a mi querida Jeliel (yo me entiendo) y va el estúpido de mi blog y coloca todo como le sale de la oreja izquierda. Esto no es serio, señor blog, que lo sepa.


En otro orden de las cosas; he tardado una hora en escribir esta entrada. EL motivo principal es que me he ido a comer dejándola a medias.

lunes, 1 de agosto de 2011

No sé escribir dos veces la misma palabra.

Es una entrada chorra a base de bien, pero cotilleando y buscando imágenes para la cabezera me he dado cuenta de que en la URL puse "tal" en lugar de "Tan", como era mi intención.
Motivo por el cual luego no encontraba mi blog.